Últimamente, debido al lanzamiento de nuestros zapatos minimalistas Mei y Haru, hemos recibido numerosas preguntas sobre nuestros productos y nos hemos percatado de que mucha gente no tiene claro en qué consiste el calzado minimalista. Así que hemos decidido escribir un pequeño artículo para intentar aclarar las dudas más comunes.
En Pies Sucios tenemos claras las ventajas de ir descalzo, ya que nuestro pie es un complejo sistema con dos funciones bien definidas:
- Sostener el cuerpo (obviamente), para lo cual debe estar sano, fuerte y en forma.
- Recoger información sobre el suelo que pisamos (sentirlo) y transmitir esa información al resto del sistema locomotor para que actúe en consecuencia (postura, tensión muscular, coordinación, propiocepción...).
Al encerrar el pie en un zapato rígido, pesado y grueso, estamos impidiendo que el pie realice esas funciones. La musculatura del pie se atrofia porque no puede moverse y la información del suelo que recibe está distorsionada por tacones y amortiguaciones.
Los zapatos minimalistas son un tipo de calzado diseñado para interferir lo menos posible con el movimiento y la sensibilidad del pie, lo que se traduce en que el pie se siente y se comporta como si estuviera descalzo. Estos zapatos proporcionan una experiencia más natural y permiten que los pies se muevan de manera más libre.
Algunos aspectos clave del calzado minimalista son:
- Suela delgada: las suelas de los zapatos minimalistas suelen ser muy delgadas, lo que permite que el pie tenga una mayor tacto y sensación del terreno y una mayor movilidad.
- Poco peso: estos zapatos suelen ser ligeros, lo que ayuda a reducir la interferencia en la mecánica natural de caminar y correr.
- Mínimo 'drop': el 'drop' (caída) se refiere a la diferencia en altura entre el talón y la parte delantera del pie, lo que viene siendo el tacón. Los zapatos minimalistas tienen un drop mínimo o, mejor, son completamente planos, lo que fomenta una pisada natural: evita que 'hinquemos' los talones al pisar. Un calzado sin 'caída' se dice que es 'drop 0'.
- Amplio espacio para los dedos: los zapatos minimalistas suelen tener una zona de dedos más ancha y un diseño con materiales más flexibles, lo que permite que los dedos se extiendan y se muevan de manera más natural.
- Poca amortiguación: a diferencia del calzado deportivo tradicional, el calzado minimalista (sean zapatos, zapatillas o sandalias) suele tener poca o ninguna amortiguación. Esto significa que el pie puede sentir mejor el terreno y promueve una técnica de carrera más eficiente. Sentir el terreno es muy importante para disparar todos los reflejos naturales de nuestro conjunto locomotor, reflejos programados por nuestra genética para producir un patrón de movimiento óptimo.
El calzado minimalista, ya sea en el día a día o en el deporte, ayuda a fortalecer los músculos de los pies y las piernas, mejora la postura y puede prevenir lesiones relacionadas con el calzado al fomentar una forma de caminar y correr más natural.
Sin embargo, es importante mencionar que no todo el mundo se adapta bien a los zapatos minimalistas, y la transición de un calzado tradicional a uno minimalista debe hacerse gradualmente para evitar que se puedan producir lesiones por sobre-esfuerzo de músculos y tendones que, debido al calzado estándar, se han estado usando durante años de forma distinta.
La popularidad de los zapatos minimalistas ha llevado a una variedad de diseños en el mercado, desde sandalias minimalistas hasta zapatillas deportivas con características minimalistas, pasando por calzado más formal para el día a día. La elección de un par de zapatos minimalistas dependerá de las preferencias personales y de las actividades específicas en las que se desee utilizar.
Pies Sucios, pies libres, pies sanos.
